Otra apreciación sobre el gremio

Aún me sorprende la cantidad de personas con las que me relaciono que no utiliza la literatura para lo que realmente existe: para expresar, entender, y admirar lo que es ser humano. Ellos, los que transitan este mundo de comentarios preconstruídos, se acercan a la literatura dentro de dos posturas que hacen guerra entre sí: la primera es introducirse en ella como quien se introduce en un torbellino de placeres cuya única finalidad remite a lo sensual; la segunda , y la más utilizada por esta serie de ilustrados lectores -así les encanta que los llamen- es mirar la literatura y lo que ofrece como un instrumento para ejercer poder sobre los neófitos. El conocimiento como mecanismo de intimidación: qué pobre uso para algo que es producto de lo más elevado del ser humano como lo es la creatividad y el raciocinio.

Siempre me he preguntado, en relación a lo que ocurre en mi casa de estudio: ¿Qué clase de satisfacción mediocre encuentra el que utiliza la literatura para sentirse poderoso? y más aún ¿Qué clase de poder puede obtener tal triste persona dentro de un país tercermundista donde amenaza una dictadura a los que son verdaderos intelectuales?

El problema de todos los problemas es que la gente no logra solucionar sus conflictos internos antes de actuar, y antes de darse cuenta el conflicto que tuvo Javier por un caramelo con Andrés cuando estuvo en bachillerato resulta en un señorito con ganas de apoderarse de todos los caramelos del universo..., y así, baja autoestima, malas experiencias, paranoia, todo se manifiesta en las acciones de estos seres que no reconocen lo disminuído de su humanidad.

¿La solución?: aislamiento y autoreflexión. Mismo procedimiento al colocar una plaga potencial en cuarentena. Así el supuesto ilustrado no podría seguir destruyendo el sentido de la literatura en lo precario de una estética; precario porque ha más que la estética así como hay más en un libro que ideas.

Los textos tienen un alma, algo que les es trascendente e infinitamente rico en ellos y que toda estructura de poder ha fallado en ver. No quiero decir con esto que un lector ingenuo pueda entender el alma de un texto sólo porque falla en entender la formalidad del mismo. Hace falta no un lector ingenuo, pero tampoco un lector absolutamente crítico: Hace falta una lectura human-i-za-da.

¿Es posible? ... quién sabe, lo importante no es si es absolutamente posible que se tome conciencia de tal situación, lo que importa es que la meta sea siempre el bien a través del bien.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Partituras de Nightwish - Over The Hills and Far Away

Command: Cancel

Partituras de Nightwish - 10th man down