Nee wakaru desho?
¿Quién eres? Nos revelamos hace tanto tiempo, el momento era oportuno, único e irrepetible; las situaciones eran las que fueron y las que nos hicieron ser y estar, tu palabra era sorpresa, era tan luminosa que ayudó a matar la horda de sombras que me acosaba tras una solitaria figura. El pretérito acobarda un poco; y yo! ya sabes que tanto me gusta y no me gusta hablar de mi, el miedo a un ego abominable se apodera de estos restos de alma, o quizás es una sólo una vacuna ante tanto desprecio acumulado... y así supiste entender tanto, como arrancar una risa explosiva en el peor momento. El mundo nos hizo confidencias sólo perceptibles para esos ojos tuyos que tanto saben mirar; algo vi después de tanto trance. Encontramos la forma de llamarnos aún sin estar, de esperarnos sin saber - algo místico debe haber aquí, pero siempre hay algo místico en todo.- Hoy, creo, ya no entendemos, mis intentos suenan a fraude, mis preguntas no son bienvenidas, tus opiniones saben a regaño y los silencio...